Durante los procesos de fabricación de pasta y papel, el agua se reutiliza a contra corriente, lo cual reduce al mínimo la cantidad de agua dulce que se utiliza y el flujo de efluentes final.

Las aguas servidas finales que no pueden reutilizarse en el proceso se someten a un tratamiento primario y secundario.

Al final, están muy diluidas y se descargan al mar en cumplimiento con los requisitos ambientales correspondientes.

«LAS AGUAS SERVIDAS FINALES QUE NO PUEDEN REUTILIZARSE EN EL PROCESO SE SOMENTEN A UN TRATAMIENTO PRIMARIO Y SECUNDARIO».